VI

Buscando el amor de las aves bajo piedras, desconociendo que en su vientre futuro despertará. 

Creyendo en hienas disfrazadas de leones el tiempo manchó su figura, se detiene agazapada mimetizando su bondad.
Pariendo el amor incondicional junto a la cascada dorada en veneno, ciega e ingenua leche amorosa que en abundancia nutrirá.
Vulnerables hembra y cria lejos de su verdad, el cielo enojado estrellas dulces comienza a enviar.

Solitarios astros aparecen desde el agua, en el viento maestros, lenguas, colores, especies y razas traen coraje, fuerza.
Así de piedra en piedra brincar sin su cria soltar. 

Matrices ancestrales que guían noches sin luna.
Voces ocultas protegen, traslúcidas las dagas, grietas en las pupilas acentúan su rigor.
El metal en la sangre refleja el sol.

Es el llamado de la maestra,  asomará sus haces desde las cavernas, correrá junto a los suyos durante un segundo de jungla. 

Q.